Los chozos, cucos o gallineros son antiguas construcciones, hechas con piedras, que servían como refugio para pastores y campesinos, son una especie de casilla en el campo de forma cilíndrica, terminados en punta redondeada, chatos y sin enlucir (Actualmente al encontrarse reformados, si que presentan cemento, yeso y otros aglutinantes). Se construían utilizando la técnica de la piedra seca, es decir poniendo piedra sobre piedra sin usar ningún tipo de cemento o argamasa, debido a esto eran construcciones baratas y relativamente simples de hacer, forman parte de la antigua arquitectura rural de la Manchuela. En la actualidad, en Alborea contamos con tres de estas construcciones: el gallinero de Piqueras, el chozo de la Olla Mizarán y el cuco de Cantinas.

 

Chozo Los Buhos, muy próximo al nucleo urbano, por el sendero PR-AB-09